crema humectante casera para el rostro

Muchas personas nos han preguntado por recetas para la preparación de cremas humectantes caseras.

Es importante observar que la piel requiere, sin duda, de una ayuda para prolongar sus cualidades juveniles de textura y lozanía y este tipo de cremas pueden contribuir a ese logro.

Aunque su elaboración puede tomar tiempo en algunos casos, sus usos pueden ser realmente sorprendentes, ya que nutrirán la piel a nivel celular, además de restaurarla, suavizarla, equilibrarla, hidratarla y repararla

Crema humectante casera #1:

Este crema humectante casera tiene propiedades regeneradoras y antiinflamatorias, ya que contiene ácidos grasos que alimentan, ayudan a reparar y miman la piel madura y estresada por el medio ambiente, dejando tras de sí una sensación saludable, un tono más uniforme y flexibilidad.

Esta mezcla también puede usarse para ayudar a prevenir las marcas de estiramiento, para acelerar la curación y la regeneración de la piel después de una operación y para ayudar a curar quemaduras leves de primer grado.

Ingredientes:

7 gotas de aceite esencial de semilla de zanahoria
1 cucharadita de aceite de rosa mosqueta
2 cucharadita de aceite de nuez de macadamia
3 cucharadas de cera de abeja

Preparación

Poner a baño María la cera de abeja y una vez esté líquido añadir el resto de los ingredientes. Revolver y retirar del fuego. Dejar refrescar y guardar en un recipiente con tapa hermética o de rosca. Aplicar sobre el rostro todas las noches especialmente en las zonas más secas.

No precisa refrigeración, pero para aprovechar su máxima eficacia y frescura, úsalo en el plazo de seis meses.

Crema humectante casera #2:

Esta crema está diseñada para pieles sensibles, castigadas por los elementos, enrojecidas, secas e irritadas. Los aceites utilizados son nutritivos, acondicionadores, protectores y muy absorbentes. Cada uno de estos aceites esenciales es conocido por sus propiedades calmantes, relajantes y antiinflamatorias.

Ingredientes

5 gotas de cada uno de los aceites esenciales siguientes: manzanilla alemana, caléndula, helicriso y lavanda
1 cucharada sopera de aceite de jojoba
1 cucharadita de nuez de macadamia
3 cucharadas de cera de abeja

Preparación

Poner a baño María la cera de abeja y, una vez esté líquido, verter los aceites y batir vigorosamente para su completa integración.

Colocar esta crema en un recipiente con tapa hermética o de rosca y aplicar, preferiblemente de noche, empezando por la parte alta del pecho, después el cuello y después la cara, mediante caricias circulares, ascendentes y dirigidas hacia fuera.

Esta crema también puede usarse como tratamiento calmante para las irritaciones debidas a picaduras de insectos, exposición a plantas venenosas, erupciones causadas por los pañales, eccema, psoriasis y cualquier dermatitis por contacto..